Porque los gustos hay que dárselos en vida, Jorge Rojas abrió las puertas de su casa a amigos, seguidoras y prensa del país en un un concierto íntimo para celebrar sus 10 años como solista, como anticipo de las presentaciones programadas en el Orfeo de Córdoba y el Gran Rex de Buenos Aires de su disco “Sinfónico”.
Acompañado por su banda estable más un seleccionado de 70 músicos de Córdoba bajo la dirección de Obi Homer, Rojas montó un espectáculo impecable en un recorrido por sus grandes éxitos de la década y la concreción de un segundo sueño compartido: adaptar su repertorio a una orquesta sinfónica y dirigirla.
La casa está ubicada en Anisacate, una pequeña localidad del Valle de Paravachasca, a 46 km de la capital cordobesa. Allí es donde nace Complejo Quilay, compuesto por un estudio de grabación de última generación, las oficinas y una sala-teatro con capacidad para 150 personas, con posibilidad de realizar contenidos audiovisuales, el cual, por supuesto, será abierto a otros artistas. Sueño tres.
Sinfónico fue grabado en diciembre de 2015 en un concierto especial con la Orquesta Sinfónica de Salta. Es el disco que cierra la trilogía de celebración iniciada con Aniversario, seguido por Folclore, trabajo compartido con sus hermanos Lucio y Alfredo; y que seguramente abre una nueva etapa en el firme camino artístico de Rojas.
El artista se reinventa a cada momento y en esta oportunidad abre las puertas de su casa aportando una infraestructura necesaria para el desarrollo de la música en la región.
Nacido en lo profundo del chaco salteño, con una voz que enamora, y prepotencia de trabajo, fue en busca de sus sueños. Anoche, Cultura Caníbal estuvo presente viendo desde primera fila cómo su cuerpo vibraba con la emoción que solo sienten los que hacen de sus sueños una verdad.
