La Compañía Fabulera. Anécdotas hechas canción

Facebook
WhatsApp
Twitter
LinkedIn

Perdido en Güemes es el primer single de La Compañía Fabulera, una agrupación nacida para ponerle música a las anécdotas.

Barrio Güemes, en Córdoba, es un corredor casi natural y obligado para artistas, bohemios y artesanos. Allí surgen historias que van del amor al terror, de la fantasía a la nostalgia, del policial a la mitología.

El swing compuesto por Leo Tangenti, ideólogo de La Fabulera, cuenta el periplo de un artista desconcertado que, ante la mirada intimidatoria de los muchachos del barrio, emprende una corrida digna de una película western para acabar, por antojo de la fortuna, en un bar de La Cañada.

Una orquesta inestable

Según ellos mismos remarcan, «La Compañía Fabulera es un ensamble musical especialista en cantar historias cotidianas, reivindicando las vivencias comunes de personas comunes. Su esencia – agregan – es exacerbar esas porciones del pasado que recordamos con detalles casi perfectos».

El single y el video de Perdido en Güemes están disponibles en todos los servicios de streaming.
Click aquí para escucharlo en tu plataforma favorita

El creador, Leo Tangenti, tiene por costumbre romper los moldes establecidos para sus performances. «Históricamente he recurrido a mis dos grandes escuelas, que son Akun Maia y El Cuarteto del Amor para poder integrarlos», dice.

Define a La Fabulera como una orquesta inestable «no por la estabilidad emocional de sus musiques, sino porque tienen una participación discontinua, a excepción de la mía, aunque la búsqueda hacia el futuro es tener un rol de director». «Por el momento soy el director de una orquesta que no existe y cuyos miembros ni siquiera saben que la integran» ríe y continúa «quizás en algún momento algunas personas logren estabilidad, pero la idea es estar abiertos a cualquier participación«.

La anecdota es muy importante para la vida social
y la reivindicación de la vida común

Leo Tangenti

De lo particular a lo colectivo

La anécdota, ese pequeño cuento en el cual se destaca más el sentimiento del cuentista al momento de contar su historia, que la relevancia social de lo vivido, es una manera de homenajear la vida.

«La idea surgió en pandemia, intentando grabar en casa», cuenta Leo. «Mis amigues me chicaneaban porque suelo contar muchas anécdotas graciosas y exagerarlas y fabular. A partir de eso, por simple tozudez comencé a googlear sobre anécdotas para responderles, y empecé a entender que la anécdota es muy importante para la vida social y la reivindicación de la vida común».

«Nadie puede solo en este mundo del arte, por lo que comencé a convocar musiques a contar anécdotas para componer y, aunque no recibí muchas respuestas en este sentido, si me ofrecieron integrar bandas para tocar estas canciones, por lo que se transformó en un proyecto colectivo», define.

La orquesta convoca a cualquier persona interesada en convertir en canción alguna de sus vivencias. Para ello, recibe propuestas en cfabulera@gmail.com. «Cualquiera puede contar una anécdota con el cristal con que la vio. no hace falta que escriba bien ni que sepa música», cierra el director.

Más Para leer