La Pata de la Tuerta nació en el momento en que todo parecía comenzar a morir. En realidad, todavía quedaba la esperanza que podía llegar a surgir entre las ruinas de una Argentina que ya casi no era. Desde el centro del país vino la explosión. En medio del gris desolador, Córdoba paría un producto muy propio de su acervo cultural: mestizo, feliz, bailador, cargado de horizontes y buenos augurios. Pese a todo, los sueños siempre estuvieron en el mismo lugar y la formula para alcanzarlos nunca se modificó demasiado: había que caminar, correr, trabajar y andar con convicción. Y así fue.
Desde esos comienzos pasaron 17 años, cinco discos, dos DVDs y un sinnúmero de actuaciones por escenarios de casi todos los continentes. Con distintos momentos de suerte, con diferentes niveles de pretensión y con esos horizontes que se fueron moviendo a medida que los años fueron siguiendo su curso. Pero lo que siempre se mantuvo intacto es el deseo de crecer, de avanzar pese a las complicaciones y de trabajar todo lo que resulte necesario para ocupar los espacios que necesitan ser ocupados, decir las cosas que hay que decir y, por supuesto, siempre bailar.
Dice Juan Carlos Rogna en su libro “La Pata de la Tuerta. Un carnaval de Ida y Vuelta» que la banda “tenía signado un destino de carnaval”. Es probable que así sea y que parte de ese nacimiento haya servido como cósmica para transitar a la par de los años en que esa fiesta popular fue retomando los espacios otrora negados. “Todos (o casi) componen, además de que otros autores suelen rondar el escenario. Y cada tema permite que se muestre en relieve una figura que solo puede salir de ese barro con aires de estudiantina despreocupada, y que en el escenario funciona con precisión de relojería. Ahí es cuando se nota, sin que se vea mucho, el trabajo de Ale y el Paca (los asistentes de escenario) y del sonidista. Antes, durante y después, está la producción de Manuela consiguiendo lugares, vendiendo entradas…y lo que haga falta. Manuela Heredia, la que empezó en La Pata a partir de lo que más le importaba: sumarle barra a la banda. O sea: veo en funcionamiento un colectivo artístico, no una suma de individualidades estelares. El despliegue de semejante equipo, que empezó con la música cerebral y que ahora anda en onda cardiotripa, se asemeja a un ritual de renacimiento. El renacer es la clave de La Pata de la Tuerta”
La Pata de la Tuerta cumple 17 años, lo festejará el Viernes 9 de Marzo en Casa Babylon Club junto a Fede Flores y los Nenes Bian, mientras en la gatera se empiezan a preparar las canciones que seguirán haciendo crecer el legado cultural de una de las bandas cordobesas más importantes del siglo XXI.